Codex Stan para banano o plátano
El Codex Alimentarius (palabra latín: “código de los alimentos”) es una colección reconocida internacionalmente de estándares, códigos de prácticas, guías y otras recomendaciones relativas a los alimentos, su producción y seguridad alimentaria, bajo el objetivo de la protección del consumidor.
El objeto de estas normas alimentarias es proteger la salud del consumidor y asegurar la aplicación de prácticas equitativas en el comercio de los alimentos.
NORMA PARA EL BANANO (PLÁTANO)
(CODEX STAN 205-1997)
1. DEFINICIÓN DEL PRODUCTO
Esta Norma se aplica a las variedades comerciales de bananos (plátanos) obtenidos de Musa spp.(AAA), de la familia Musaceae, en estado verde, que habrán de suministrarse frescos al consumidor, después
de su acondicionamiento y envasado. Se excluyen los bananos (plátanos) destinados solamente para su
cocción ó a la elaboración industrial. Las variedades reguladas por esta Norma se indican en el Anexo.
2. DISPOSICIONES RELATIVAS A LA CALIDAD
2.1 REQUISITOS MÍNIMOS
En todas las categorías, a reserva de las disposiciones especiales para cada categoría y las tolerancias permitidas, los bananos (plátanos) deberán:
– estar enteros (tomando el dedo como referencia);
– estar sanos, deberán excluirse los productos afectados por podredumbre o deterioro que hagan que no
sean aptos para el consumo;
– estar limpios, y prácticamente exentos de cualquier materia extraña visible;
– estar prácticamente exentos de plagas que afecten al aspecto general del producto;
– estar prácticamente exentos de daños causados por plagas;
– estar exentos de humedad externa anormal, salvo la condensación consiguiente a su remoción de una
cámara frigorífica y los bananos (plátanos) envasados en atmósfera modificada;
– estar exentos de cualquier olor y/o sabor extraños;
– ser de consistencia firme;
– estar exentos de daños causados por bajas temperaturas;
– estar prácticamente exentos de magulladuras;
– estar exentos de malformaciones o curvaturas anormales de los dedos;
– estar sin pistilos;
– estar con el pedúnculo intacto, sin estar doblados ni dañados por hongos o desecados.
Además, las manos y los racimos deberán incluir lo siguiente:
– una porción suficiente de cuello de color normal, sano y exento de contaminación por hongos;
– un cuello de corte limpio, no achaflanado o rasgado, y sin fragmentos de pedúnculo.